domingo, 6 de noviembre de 2011

Construyamos castillos de arena muy cerca del mal.

Construyamos castillos de arena muy cerca del mal.
Usemos tan solo la sal de las batallas perdidas
el gemido de los deseos quemados en las arenas
discurriendo por los dedos como ardientes utopías.

Construyamos castillos de arena muy cerca del mal.
La anciandad de la marea no sanará nuestras bocas
mientras las hormigas del vientre devoran las excusas
y las uñas como héroes van rasgando las ropas.

Construyamos castillos de arena muy cerca del mal.
Dejemos que el agua se trague la desgarradora sensación de ahogarnos.
Dejemos que el mal se lleve todas las excusas...
y empecemos a devorarnos.

2 comentarios:

  1. "La ancianidad de la marea no sanará nuestras bocas"

    Me quedo con ese verso. Es perfecto.
    Se merece un azote, pero de los placenteros.
    Un saludo Yuste.

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  2. Precioso. Este verso me ha dejado sin aliento

    "Dejemos que el agua se trague la desgarradora sensación de ahogarnos."

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